Compartimos a continuación el artículo editorial de Alicia Cañellas para el estudio de caso: "La formación, la revolución digital está en marcha" de Bsoco.
De tendencias y predicciones en e-learning: el futuro es ahora.
El impacto que la revolución tecnológica y digital está suponiendo para la formación corporativa en la empresa es un tema que, desde hace años, se encuentra a la orden del día.
Dejando de lado conceptos como neurociencia, big data, robótica, wareables o realidad virtual y aumentada (conceptos que nos hacen prever un futuro de la formación que, a priori, puede parecernos bastante lejano y más ligado a la ciencia ficción), la realidad indica que los pasos que se están marcando actualmente alrededor de la digitalización del mercado de la formación, apuntan cada vez más (queramos o no) hacia estas direcciones. Es el nuevo futuro presente. Y esta situación, como cualquier otra que comporte cierto cambio y/o adaptación, requiere de una preparación y análisis previo por parte de las organizaciones y, especialmente, de los responsables de formación encargados del diseño de experiencias formativas dentro de la empresa.
Las tendencias de base de las que hablamos, puramente presentes y no tan “futuristas” que, en relación a la tecnología y a sus implicaciones pedagógicas, nos pueden ayudar a analizar y evaluar si a día de hoy nos encontramos situados, como organización, dentro de este paradigma orientado al futuro presente, podrían ser las que a continuación vamos a intentar revisar. ¿Se encuentra nuestra organización en sintonía con ellas? Intentemos realizar un ejercicio de análisis al respecto:
1/ Formación sin barreras: Si el hecho de adquirir información era antes uno de los aspectos primordiales dentro de los procesos formativos, hoy en día la gestión del conocimiento en las organizaciones es la que marca la pauta y la diferencia. Es el valor añadido en las empresas. Los procesos de digitalización permiten tener al alcance de cualquiera una oferta formativa que se internacionaliza, capaz de atraer talento más allá de las fronteras y de una manera global. El aula (sea presencial o virtual) ya no es el único espacio de acceso a la formación y al desarrollo competencial de los trabajadores. Los contenidos son globales, y en base a ello deberemos pensar en acciones o estrategias “locales” que nos permitan aprovechar esta situación, tanto desde dentro hacia fuera, como desde fuera hacia dentro.
2/ Aprendizajes sin límites de espacio o tiempo: La ubicuidad es un fenómeno ligado a la digitalización formativa, ya desde los inicios del e-learning (se dé ésta en base a procedimientos síncronos o asíncronos). Los límites espacio-temporales, en cierta manera, van quedando difuminados. Esto es un hecho, y requiere rediseñar también las estrategias de enseñanza-aprendizaje dentro de las organizaciones, si deseamos lograr aprovechar todo el potencial que este paradigma no-espacio/no-tiempo nos ofrece.
3/ Claves metodológicas abiertas: En los últimos años (y en gran parte en relación a estos dos puntos anteriores), los procesos de aprendizaje vinculados al e-learning han ido sufriendo paulatinamente diferentes transformaciones que, en definitiva, han originado una transformación integral de la formación, impensable inicialmente hace algunos años. El peso de lo social, de lo informal, de lo abierto y de lo crowd, repercute sin duda en el desarrollo de los Entornos Personales de Apredizaje (PLEs) de los trabajadores, por lo que las metodologías a seguir en las áreas de formación corporativa han de adaptarse también a ello, teniendo en cuenta estos aspectos y tomando como ejemplo modelos de e-learning más basados en lo abierto.
4/ Hacia soluciones integrales: Se está pasando del producto formativo al servicio formativo, a pasos agigantados. Los nuevos modelos de aprendizaje, basados en una confluencia de multitud de fuentes a la hora de obtener contenidos y, en muchas ocasiones, con el fenómeno mashup como bandera, conforman cada vez más soluciones tecnológicas nuevas, al servicio de la formación corporativa. Éstas potencian (entre otros aspectos) la integración comunicativa entre profesores y alumnos, así como entre iguales, facilitando los procesos de gestión del conocimiento que anteriormente citábamos, e incluyendo tanto sistemas de implicación emocional en los procesos de aprendizaje, como verdaderos sistemas de análisis de datos, orientados a la predicción para la mejora de la experiencia formativa. Aquéllas soluciones a nivel de plataforma, que sean capaces o que ayuden a integrar las herramientas necesarias para configurar ecosistemas formativos completos, serán las que realmente tengan la capacidad de despuntar en el sector.
Tener en cuenta estos aspectos o tendencias nos ayudará a saber si estamos preparados para ofrecer, como organización, una respuesta efectiva y adecuada a esta realidad de futuro presente, del ahora, que a la vez resulta necesaria para las evoluciones que se están marcando ya en torno a las áreas de aprendizaje empresarial.
1/ Formación sin barreras: Si el hecho de adquirir información era antes uno de los aspectos primordiales dentro de los procesos formativos, hoy en día la gestión del conocimiento en las organizaciones es la que marca la pauta y la diferencia. Es el valor añadido en las empresas. Los procesos de digitalización permiten tener al alcance de cualquiera una oferta formativa que se internacionaliza, capaz de atraer talento más allá de las fronteras y de una manera global. El aula (sea presencial o virtual) ya no es el único espacio de acceso a la formación y al desarrollo competencial de los trabajadores. Los contenidos son globales, y en base a ello deberemos pensar en acciones o estrategias “locales” que nos permitan aprovechar esta situación, tanto desde dentro hacia fuera, como desde fuera hacia dentro.
2/ Aprendizajes sin límites de espacio o tiempo: La ubicuidad es un fenómeno ligado a la digitalización formativa, ya desde los inicios del e-learning (se dé ésta en base a procedimientos síncronos o asíncronos). Los límites espacio-temporales, en cierta manera, van quedando difuminados. Esto es un hecho, y requiere rediseñar también las estrategias de enseñanza-aprendizaje dentro de las organizaciones, si deseamos lograr aprovechar todo el potencial que este paradigma no-espacio/no-tiempo nos ofrece.
3/ Claves metodológicas abiertas: En los últimos años (y en gran parte en relación a estos dos puntos anteriores), los procesos de aprendizaje vinculados al e-learning han ido sufriendo paulatinamente diferentes transformaciones que, en definitiva, han originado una transformación integral de la formación, impensable inicialmente hace algunos años. El peso de lo social, de lo informal, de lo abierto y de lo crowd, repercute sin duda en el desarrollo de los Entornos Personales de Apredizaje (PLEs) de los trabajadores, por lo que las metodologías a seguir en las áreas de formación corporativa han de adaptarse también a ello, teniendo en cuenta estos aspectos y tomando como ejemplo modelos de e-learning más basados en lo abierto.
4/ Hacia soluciones integrales: Se está pasando del producto formativo al servicio formativo, a pasos agigantados. Los nuevos modelos de aprendizaje, basados en una confluencia de multitud de fuentes a la hora de obtener contenidos y, en muchas ocasiones, con el fenómeno mashup como bandera, conforman cada vez más soluciones tecnológicas nuevas, al servicio de la formación corporativa. Éstas potencian (entre otros aspectos) la integración comunicativa entre profesores y alumnos, así como entre iguales, facilitando los procesos de gestión del conocimiento que anteriormente citábamos, e incluyendo tanto sistemas de implicación emocional en los procesos de aprendizaje, como verdaderos sistemas de análisis de datos, orientados a la predicción para la mejora de la experiencia formativa. Aquéllas soluciones a nivel de plataforma, que sean capaces o que ayuden a integrar las herramientas necesarias para configurar ecosistemas formativos completos, serán las que realmente tengan la capacidad de despuntar en el sector.
Tener en cuenta estos aspectos o tendencias nos ayudará a saber si estamos preparados para ofrecer, como organización, una respuesta efectiva y adecuada a esta realidad de futuro presente, del ahora, que a la vez resulta necesaria para las evoluciones que se están marcando ya en torno a las áreas de aprendizaje empresarial.
Alicia Cañellas.