En ocasiones, ante el
reto de generar una nueva idea (sea para el objetivo que sea), puede que nos
encontremos escasos de inspiración, como bloqueados, con la mente en blanco… En
estos casos, un cambio de perspectiva y punto de enfoque puede resultar la
mejor estrategia para potenciar nuestra creatividad.
Para empezar, te recomendamos
el visionado de este video, que seguro te resultará inspirador: “¿De dónde
vienen las buenas ideas?”:
A continuación, te
ofrecemos algunas técnicas (en concreto diez) para ayudarte en la generación de
nuevas ideas. Estas técnicas pueden ser aplicadas tanto de forma individual
como grupal. ¿El objetivo? Poder generar una idea innovadora aplicable a
cualquier ámbito de tu interés.
Estas técnicas implican
la realización de determinadas acciones que pueden ser, en ocasiones, más
importantes que la técnica en sí misma, ya que su planteamiento nos servirá
como estímulo.
- Palabras o imágenes aleatorias: Se trata de una técnica que te permiten poder empezar a pensar desde diferentes perspectivas. Para llevarla a la práctica, recopila palabras o imágenes al azar y luego establece nexos entre ellas. Aspectos aleatorios sobre un determinado tema nos pueden permitir establecer nuevas asociaciones para abordar dicho tema, desde una perspectiva diferente, potenciando así el proceso creativo.
- Binomio fantástico: Gianni Rodari
hace su propia versión de la técnica anterior con el Binomio Fantástico,
enfocándola a la creación de cuentos infantiles y relatos. Puedes obtener más información y ejemplos de
aplicación de esta interesante técnica en el ámbito de la narración aquí:
- Reformulación: En la línea de las anteriores técnicas, intenta
cambiar la formulación de las palabras que tienes en mente en este momento
a la hora de abordar la creación de una idea en tu ámbito de actuación,
asígnale otras formas de expresarlas, busca alternativas a las palabras
que estabas utilizando para describir esa idea o tema. Aprovecha la
riqueza del lenguaje para generar nuevas ideas.
- Mapas mentales: Se trata de una técnica de recopilación de ideas
desarrollada por Tony Buzan y que
seguramente ya conoces. Esta técnica combina
las habilidades de ambos hemisferios del cerebro (el lado derecho es el
que crea y genera ideas; y el izquierdo, que obedece a la parte
lógica, ordenando dichas ideas). Hoy en día esta técnica está muy
difundida y se utiliza para distintas finalidades. En este enlace puedes
obtener información y ejemplos para intentar ponerla en práctica de cara a
la generación de ideas:
- Flor de loto: Esta técnica, de
Yasuo Matsumura, es una técnica muy visual que permite conectar conceptos
con subconceptos asociados, algo que puede parecer muy similar a los
conocidos “mapas mentales”, pero que no es exactamente igual. En el
siguiente enlace puedes encontrar información más detallada sobre cómo
aplicarla y una plantilla que te será muy útil:
- Idearte: Consulta obras de arte y céntrate
en la potencia simbólica que éstas suelen tener. Puedes incluso mezclar
diferentes movimientos artísticos. Observa las obras, intenta fluir,
centrándote en lo que te inspiran, yendo de pensamientos más de tipo
racional a pensamientos de tipo emocional. ¿Qué características tienen?
¿Qué te sugiere cada una de ellas? ¿Qué nexos podrían configurar un nuevo
tema? ¿Qué emociones te hacen sentir? Compara, interpreta, crea…
- ¡Preguntas, preguntas y más preguntas!: Ponte en la piel
de un niño pequeño y pregúntate cosas (sí, lo dejamos en abierto…): Ante
la respuesta que te des a tu pregunta en concreto, vuélvete a preguntar
con otra pregunta, como por ejemplo: “¿Cómo?”… Seguro que afloran nuevas
vías a explorar y se te ocurren interesantes y creativas ideas.
- Conexión de citas célebres: Selecciona
diferentes citas célebres que tengan que ver con la temática que
consideres (o que puedan ser susceptibles de adaptarse a ella…). Traza un
mapa que vaya de una a otra, a ver si aparecen nuevas conexiones que
puedan vehicular nuevas ideas a explorar, entorno a la temática en sí y a
la forma de abordarla.
- ¿Y si…?: esta técnica
consiste en formularse esa pregunta e intentar generar posibilidades, por
descabelladas que inicialmente nos puedan parecer. ¡Imaginación al poder!
Tal vez a partir de este planteamiento inicial, surge una buena idea.
Inténtalo.
- Acción disruptiva: Huye de los pensamientos preestablecidos, adopta otros que inicialmente puedan parecerte provocadores o incluso, en ocasiones, inicialmente “estúpidos”. Para ponerte un ejemplo: un profesor universitario expulsa de su clase a un alumno, sin motivo aparente, y seguidamente procede a formular la siguiente pregunta a su clase: ¿Qué es la “justicia”?... (Obviamente, enseguida vuelve a dejar entrar al alumno expulsado, para que sepa el motivo de esta acción y pueda también estar presente en la explicación correspondiente). Se trata de un ejemplo bastante radical, pero ¿se te ocurre alguna otra acción “disruptiva” que pueda generar resultados creativos constructivos?
Existen otras muchas
técnicas para ayudar a la generación de nuevas ideas, algunas de ellas
aplicadas a diferentes ámbitos, pero que perfectamente puedes adaptar a tus
necesidades. Te animamos a que investigues sobre dichas técnicas para dar con
aquéllas que te resulten más interesantes y útiles.
Alicia Cañellas.